Es una de las plantas aromáticas más valoradas en cocina. Tiene un gusto dulce, es fragante y parece que es más fuerte cuando en verano el sol aumenta su intensidad.
Esta planta debe estar a pleno sol, sumamente sensible al frío, no resiste las heladas.
Es muy sencilla de cultivar, crece muy bien en tierra fresca, ligera y bien drenada. Es conveniente abonar el suelo antes de la siembra.